Una pasión convertida en un gran proyecto:
Gary y su esposa no buscaban realmente correr la Fastnet Race al principio… Pero cuando descubrieron el Excess 14, fue una evidencia. Volúmenes generosos para vivir a bordo con sus dos perros, un diseño cómodo para largas travesías, y sobre todo: una verdadera conexión con el mar.
Las dobles estaciones de timón hicieron la diferencia. “Quería sentir el mar, no solo mirarlo desde arriba en un flybridge”, explica Gary.
Un catamarán diseñado para el rendimiento:
Amante de la innovación, Gary personalizó rápidamente su barco: Starlink, winches eléctricos, instrumentos de última generación, cámara para maniobras nocturnas… El objetivo: más simplicidad, más seguridad, pero siempre con esa agilidad propia de Excess.
Con la versión Pulse Line y un código 0, midió todo el potencial de su barco durante una primera regata local. ¿El siguiente paso? Casi una apuesta loca: alinearse en la línea de salida de la Rolex Fastnet Race 2025.
Una aventura hecha posible:
Gracias al apoyo de su concesionario Sea Ventures, Gary partió con confianza. ¿El resultado? “El barco realmente se mantiene, es fenomenal. No hay mucho que cambiaría.”
Para él, el Excess 14 combina lo mejor de ambos mundos: un catamarán marino, seguro y de alto rendimiento, pero también un verdadero refugio de vida con una cabina principal diseñada como una suite privada.
¿Y ahora?
Después de 191 millas de puro compromiso, Gary no planea detenerse ahí. La Rolex Middle Sea Race en Malta ya está en su mira. Una nueva aventura para compartir a bordo de su Excess 14.
Esta historia ilustra lo que hace a Excess: empujar los límites y vivir el mar de manera diferente.
Su testimonio completo: